Los Reyes Magos tienen una de las tareas más exigentes del año: recorrer miles de kilómetros, cargados de regalos, para llegar a todos los hogares en una sola noche. ¡Un verdadero maratón navideño!
Desde el Ilustre Colegio Profesional de Podólogos de Andalucía, hemos preparado una serie de consejos podológicos para que Sus Majestades cuiden de sus pies y puedan centrarse en seguir repartiendo ilusión por el mundo sin molestias.
Calzado cómodo y adecuado
Con tantas horas caminando y montando en camello, es fundamental que los Reyes Magos utilicen un calzado que combine comodidad y funcionalidad. Además, un calzado acolchado protege contra impactos y amortigua cada paso, algo crucial cuando se recorren terrenos irregulares o se suben y bajan cargados de regalos.
Las suelas antideslizantes y transpirables también son imprescindibles para garantizar estabilidad y evitar resbalones, especialmente en zonas húmedas o con nieve, frecuentes en esta época del año. Y no podemos olvidar un correcto ajuste del calzado: ni demasiado apretado ni demasiado holgado, para prevenir rozaduras, ampollas o incluso lesiones como torceduras.
Cuidado con las largas caminatas
Después de caminar tantos kilómetros, es crucial dedicar unos minutos a cuidar los pies y las pantorrillas para prevenir sobrecargas musculares y mantenerlos en óptimas condiciones. Realizar estiramientos específicos, como flexionar y extender los dedos o realizar círculos con los tobillos, ayuda a aliviar la tensión acumulada y mejora la circulación, reduciendo la sensación de pesadez o fatiga.
Un pequeño masaje al final del día es aún más beneficioso: aplicar una crema hidratante con movimientos circulares no solo relajará los músculos, sino que también mantendrá la piel nutrida, evitando sequedad o durezas, especialmente en los talones. Además, incluir aceites esenciales con propiedades calmantes, como lavanda o mentol, puede potenciar la sensación de descanso y frescura.
Hidratación para combatir el frío y la sequedad
El frío del desierto y las bajas temperaturas nocturnas pueden resecar la piel, especialmente en zonas como los talones, que están más expuestas a la fricción del calzado y a la presión de caminar largas distancias. La falta de humedad en el aire también contribuye a que la piel pierda su hidratación natural, lo que puede provocar que se vuelva áspera, rígida e incluso que aparezcan grietas dolorosas.
Además, unos calcetines de algodón o de fibras vegetales evitarán el exceso de sudor y reducirán el riesgo de hongos o infecciones. ¡La comodidad empieza desde dentro!
Antes y después de la caminata, al podólogo
Tal y como ocurre con los deportistas, Sus Majestades de Oriente tendrán que preparar sus pies con una semana o diez días de antelación para asegurarse de que las uñas están recortadas correctamente y no hay ninguna patología subyacente.
Asimismo, tras finalizar la caminata, si notan molestias, durezas o cualquier señal de alarma, es mejor parar y acudir a un podólogo para evitar lesiones
Estos son tan solo algunos cuidados simples pero eficaces ayudarán a los Reyes Magos a mantener sus pies en condiciones óptimas para continuar su gran misión sin molestias.
¡Esperamos que estas recomendaciones lleguen a Oriente y Sus Majestades puedan cuidar de sus pies como se merecen! Y tú, ¿ya has preparado tus zapatos para recibirlos?